Según lo previsto
Subimos cómo os comentaba el viernes que tenía que ser. Porque así está escrito en el guión de los amos del mercado. Y es que unos índices dubitativos no tienen el poder de atracción que se requiere para atraer a los inversores particulares que aun siguen estando fuera del mercado.
Leo hoy en los medios, “Los ciudadanos americanos mantienen una liquidez, incluyendo depósitos bancarios y los fondos de dinero, de 9,55 billones de dólares, según datos de la Fed. Esa cantidad es bastante para comprar todo el S&P 500, que capitaliza 9,22 billones de dólares."
Pues si, a ellos les estamos esperando. Y a sus dolares. Y por eso el éxtasis mediático que acompaña a todos los valores. Y por eso los brotes verdes y la semana de la recuperación que nos ha dado la CNN. Y por eso vamos a subir.
Pero que se den prisa, si. Porque no es casualidad que también pudiéramos leer hoy en los medios: “Más de 380 valores en distribución y poco más de 30 en acumulación. Una lectura extrema de sobrecompra de Investors Intelligence, lo que representa el mayor clímax comprador del año y sugiere que un techo esta cerca."
Y tan cerca. Ahora entendemos el volumen que mueven muchos valores. Distribución pura y dura de las manos fuertes.
Aprovechad el último impulso de este mercado alcista. Compremos y dejémonos llevar a máximos. Pero quitaros de la cabeza los brotes verdes y las historias fabulosas porque tocara caer.
Y cuando ese momento llegue y la debilidad en los índices empiece a hacerse patente, nada nos impedirá liquidar la cartera y ponernos cortos. Y mientras los creyentes, alentados por los de siempre, que hablaran de corrección sana dentro de una fuerte tendencia alcista, compren a cada recorte, victimas del clímax comprador, nosotros, los que no sabemos de titulares y solo escuchamos a los gráficos, añadiremos posiciones cortas en cada nueva resistencia.
Adaptarse a las circunstancias cuando estas cambien. Diseñar nuevas estrategias para tiempos distintos. Os dejo la imagen de Fernando Alonso e ING. Porque creo que refleja, de una forma nítida, lo que se requerirá de nosotros en el devenir futuro de los mercados.
Subimos cómo os comentaba el viernes que tenía que ser. Porque así está escrito en el guión de los amos del mercado. Y es que unos índices dubitativos no tienen el poder de atracción que se requiere para atraer a los inversores particulares que aun siguen estando fuera del mercado.
Leo hoy en los medios, “Los ciudadanos americanos mantienen una liquidez, incluyendo depósitos bancarios y los fondos de dinero, de 9,55 billones de dólares, según datos de la Fed. Esa cantidad es bastante para comprar todo el S&P 500, que capitaliza 9,22 billones de dólares."
Pues si, a ellos les estamos esperando. Y a sus dolares. Y por eso el éxtasis mediático que acompaña a todos los valores. Y por eso los brotes verdes y la semana de la recuperación que nos ha dado la CNN. Y por eso vamos a subir.
Pero que se den prisa, si. Porque no es casualidad que también pudiéramos leer hoy en los medios: “Más de 380 valores en distribución y poco más de 30 en acumulación. Una lectura extrema de sobrecompra de Investors Intelligence, lo que representa el mayor clímax comprador del año y sugiere que un techo esta cerca."
Y tan cerca. Ahora entendemos el volumen que mueven muchos valores. Distribución pura y dura de las manos fuertes.
Aprovechad el último impulso de este mercado alcista. Compremos y dejémonos llevar a máximos. Pero quitaros de la cabeza los brotes verdes y las historias fabulosas porque tocara caer.
Y cuando ese momento llegue y la debilidad en los índices empiece a hacerse patente, nada nos impedirá liquidar la cartera y ponernos cortos. Y mientras los creyentes, alentados por los de siempre, que hablaran de corrección sana dentro de una fuerte tendencia alcista, compren a cada recorte, victimas del clímax comprador, nosotros, los que no sabemos de titulares y solo escuchamos a los gráficos, añadiremos posiciones cortas en cada nueva resistencia.
Adaptarse a las circunstancias cuando estas cambien. Diseñar nuevas estrategias para tiempos distintos. Os dejo la imagen de Fernando Alonso e ING. Porque creo que refleja, de una forma nítida, lo que se requerirá de nosotros en el devenir futuro de los mercados.
Un saludo, Enrique
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